Es algo que flota en el aire que respiro. Todos somos tan distintos, únicos, especiales, diferentes y al mismo tiempo tan iguales que esa aparente contradicción no deja de sorprenderme.
Al mediodía he comido con mi jefa, la directora de la resi y hemos compartido experiencias de nuestras vidas: que si maridos, que si separaciones que si hijos, que si padres, amigos, viajes, vacaciones....nuestras experiencias eran distintas, pero en el fondo eran las mismas y curiosamente, nuestra forma de reaccionar ha sido muy similar.
Esto avala la teoría de la psicología del eneagrama (si os interesa tengo vinculada alguna página web sobre ella) que dice que todos los seres humanos nos podemos dividir en 9 tipos de carácter, basados en los pecados capitales entendidos como pasiones (9 y no 7... no sé qué Papa decidió eliminar dos de ellos no sé porque razón): Ira, Orgullo, Vanidad, Envidia, Avaricia, Miedo, Gula, Lujuria e Ignorancia.
La cosa no es tan simple como parece, entre otras cosas porque lo habitual es que aquella pasión que más negamos y odiamos suele ser la nuestra y se desarrolla en los primeros años de la niñez, de los 0 a los 7 años, como bien indicó nuestro querido Freud. Ese desarrollo es causado por las experiencias que vivimos en el seno familiar como mecanismo de defensa para nuestra supervivencia, en busca del amor y aceptación de nuestros progenitores.
De mayores esos mecanismos de defensa se convierten en las neurosis que todos tenemos, base de nuestro carácter y de nuestra sombra, esa parte inconsciente que nos domina sin que nos enteremos.
Y ahí encuentro yo la explicación de esa paradoja que es que todo ser humano es único e irrepetible y al mismo tiempo tan similar a todos los demás.
Y seguiría escribiendo sobre el tema, pero mi tiempo en el ordenador se ha agotado y le toca el turno a mi hijo.
Ciaoooo
4 comentarios:
Sabes lo curioso, bajo mi punto de vista, que las igualdades nos separan y las diferencias nos unen, muy en el fondo, la humanidad es maravillosa...
Buenas noches!!!
pd. que buena entrada Ana!
Wilde: hace poco leí un libro que se llama el Buen amor y entre otras cosas decía algo parecido a lo que tú dices: saber aprovechar las diferencias para acercarnos y no para separarnos.
Gracias!!!
Buenos días!!
MUY BUENA ENTRADA, ME GUSTA TODO LO RELACIONADO CON ETAPA EVOLUTIVAS... Y ME GUSTA EL FINAL DE LA ENTRADA, ME IMAGINO A TU HIJO MOLESTANDO LO NECESARIO PARA QUE LE DEJES...
BESOS.
NUNCA MAIS
Exactamente Tootels, molestando lo necesario, dándome prisas y agobiándome!! jajajaj!!
Besos y sí... NUNCA MAIS
Publicar un comentario